Amatxi, un bonito nombre para una podenca que ya mayor, tiene que soportar lo que es un cáncer, un cáncer de mama, que en los perros puede llegar a ser tan terrible como en los humanos si no se trata.
Abandonada y recogida en una protectora, con signos evidentes de un serio problema en las mamas, las tenía ya a punto de ulcerarse. Esta situación exigía una rápida actuación, el veterinario aconsejó una recesión de las cadenas mamarias.
Fue evidente por su vigor físico y vitalidad que merecía intervenir. Efectivamente, aunque hubo que hacerlo en dos operaciones y a pesar de la dureza de las intervenciones, se encuentra perfectamente en una casa de acogida, feliz y dispuesta a vivir muchos años. No hay más que ver las fotos que mostramos.
[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row type=»full_width_content» full_screen_row_position=»middle» scene_position=»center» text_color=»dark» text_align=»left» overlay_strength=»0.3″][vc_column column_padding=»padding-5-percent» column_padding_position=»all» background_color_opacity=»1″ background_hover_color_opacity=»1″ column_shadow=»none» width=»1/2″ tablet_text_alignment=»default» phone_text_alignment=»default» column_border_width=»none» column_border_style=»solid»]
